Los autos eléctricos “made in Argentina”
Son tres modelos que se fabrican en el país y permiten recorrer distancias a un costo muy bajo. Cuáles son y qué prestaciones ofrecen
Las grandes automotrices del mundo se marcaron como objetivo migrar toda su producción de vehículos a combustión a sistemas eléctricos en el corto plazo. Es un desafío que ya está en marcha, y que involucra a las marcas más emblemáticas.
Se trata de una apuesta a nivel global, ya que no existe mercado alguno que pueda mantenerse al margen del cambio. De hecho, la tendencia se siente en la Argentina y, si bien hasta hace poco parecía una lejana realidad, la oferta de vehículos con motores alternativos a la nafta y el diésel, ya sean híbridos o eléctricos, empezó a multiplicarse.
Hoy existen diferentes compañías que comercializan no solo modelos importados sino también fabricados en el país, tanto para utilizar en predios cerrados como en la vía pública, utilitarios y de pasajeros.
La gran ventaja de estos rodados es que sus valores son más accesibles que los importados y el consumo eléctrico es mínimo si se compara con el consumo de nafta.
Otro punto a favor es que prácticamente no tienen gastos de mantenimiento, ya que no requieren el service periódico que se realiza a los vehículos convencionales. Se trata de un ahorro extra de $15.000 promedio cada 10.000 kilómetros.
También se destacan por contar, en algunos casos, con precios muy similares a los 0Km más económicos del mercado local, ventaja que hace mucho más amplio su abanico de opciones para competir.
A continuación, un recorrido por las alternativas fabricadas en Argentina y su importe comparado con un vehículo naftero de los más económicos del mercado.
Sero Electric
La marca de fabricación nacional ofrece tres modelos: sedán, cargo alto y cargo bajo que no posee puertas. Todos ofrecen una capacidad para dos personas, con una velocidad máxima de 50km/h y una autonomía de 100 kilómetros aproximadamente.
En dimensiones, los modelos son compactos. Tienen como máximo un largo de 2,70 metros, un alto de 1,56 m y un ancho de 1,32 m.
“Los modelos no tienen equipamiento de lujo, son únicamente para moverse en la ciudad y en esta etapa lo pensamos para el uso en empresas, correos o reparticiones públicas, que son nuestros primeros clientes”, comentan desde la compañía, que arranco en 2020 a diseñar vehículos eléctricos y planea exportar al Mercosur.
En cuanto al sistema eléctrico, son aptos para recargar su batería en un tomacorriente de 220 v. El tiempo es de 5 a 7 horas si estaban totalmente descargadas. Además, cuenta saber el estado de las mismas, en el interior del vehículo posee un indicador de descarga.
Sero Electric está homologado para su uso por vía pública en sus modelos Sedán y Cargo Alto con puertas. En cuanto a los precios, los valores arrancan en $1.272.000 y se extienden hasta $1.973.000 en su versión más equipada para carga y con la batería de máxima duración.
Así, su valor inicial es similar al Fiat Mobi, el 0Km más barato del mercado, que sale $1.213.100, mientras que entre los modelos más económicos el promedio es de $1.500.000.
Si se compara el gasto entre combustible o recarga eléctrica, la diferencia es abismal. Un modelo Sero Electric consume aproximadamente $70 en energía, con lo cual se recorren entre 50 y 100 km (dependiendo el pack de baterías).
Considerando como parámetro el uso promedio que se le da a un auto convencional (15.000 kilómetros al año, 1.250 km por mes), el Sero Electric insume unos $875 mensuales en recarga contra $10.800 de uno naftero, en base un consumo promedio de 9,3 litros cada 100 km y un valor de la nafta a $92.90.
Volt eléctrico
Es otro de los modelos de fabricación nacional, que se vende en tres versiones: el Z1, W1 y E1.
El Z1 es uno de los modelos de entrada de gama y posee una autonomía de 80 km y demanda de unas 6 horas para la recarga total. En cuanto a su equipamiento, tiene frenos regenerativos, cargador on-board y luces LED.
El valor del vehículo es de $1.000.000, posicionándose como el más barato del mercado considerando también los nafteros.
El W1, por su parte, ofrece un espacio para carga, y se destaca por su autonomía: hasta 150 km con la posibilidad de sumar otra batería y duplicar esa distancia. Además, se puede recurrir a la carga rápida y tener reservas en tan solo 3 horas.
Ofrece tiene conexión 4G, acceso sin llaves, pantalla 7″ con MirrorLink jaula de contención y suelo antideslizante. Cuesta $1.900.000.
Por último, la versión e1, un urbano eléctrico, el más completo de la gama. Se controla en su totalidad de manera digital a través de una pantalla de 16 pulgadas. Este modelo también tiene una autonomía de 150 km o de 300 km si le adiciona una batería extra. El valor es de 2.300.000 pesos.
“Poseen la modalidad monopedal. Se usa el vehículo con el acelerador y al soltarlo frena. Si en una ciudad se maneja a 40km/h se hace con un solo pedal”, explican desde la empresa, que añaden que las unidades poseen “airbag e impact protection conforme a la regulación”.
Todos los modelos se encuentran en la gama de precios de los vehículos nafteros de entrada de gama. En cuanto al costo de recarga de la batería, para recorrer 100 km se necesita una carga que saldrá entre $100 y $160. Es decir, son unos $1.250 al mes.
Tito
Además del Sero Electric y Volt, que ya están homologados para la circulación en la vía pública, en San Luis se trabaja en la fabricación de Tito, un eléctrico que llegará en los próximos meses al mercado.
El proyecto está en manos de la empresa Coradir y tiene como objetivo un precio de venta inferior al Volt, que ronde los $700.000.
En cuanto a su equipamiento, cuenta con baterías desarrolladas por la empresa argentina Probattery, que le garantizan una autonomía de 100 kilómetros y una velocidad máxima de 65 km/h. El tiempo de recarga de baterías es de 8 horas.
La diferencia principal de este modelo con sus rivales es que tiene capacidad para cuatro pasajeros y podrá ser personalizado al gusto del cliente, sin límite de colores o diseños que así lo permita la línea de ensamble.
“Aunque ya tenemos una paleta y catálogo predeterminado, se puede modificar, como lo hacemos en computadora”, comenta Juan Manuel Baretto, presidente de Coradir.
Eléctricos importados
Además de los modelos de producción nacional que tienen diseños más rudimentarios para diferenciarse por precio, las automotrices “tradicionales” ya trajeron sus alternativas eléctricas al país.
La primera fue Renault, con el lanzamiento del Kangoo ZE: un utilitario de carga que se ofrece en dos versiones (cambia el tamaño) arranca en un valor de 3.437.000 pesos.
Después fue el turno de Nissan, con la presentación en toda la región del Leaf, el primer vehículo de pasajeros 100% eléctrico en el país y un modelo que desde su gestación se pensó con esa tecnología, es decir, que nació con batería.
Su precio es 61.000 dólares y marcó un antes y un después para Nissan, que al mismo tiempo se convirtió en una terminal local que produce vehículos en Córdoba.
“Con el Leaf, los usuarios realmente pueden empezar a ver algo que ya es una realidad en otras partes del mundo”, indican desde la marca. Con una carga, ofrece una autonomía de hasta 389 km en ciudad y 270 km en el ciclo combinado.
Por último, hace pocos meses se anunció el lanzamiento un eléctrico de la mano de una automotriz de alta gama. Se trata de del Audi e-tron, a un precio de 200.000 dólares. Desde la firma tuvieron en cuenta un escollo que presenta el país para la categoría: la escasez de estaciones de carga eléctrica.
Conrado Wittstatt, gerente general de Audi Argentina, asegura que “además de la carga hogareña, que representa más del 90% de la frecuencia de uso habitual, nuestra Red de Concesionarios Audi especializada en e-tron también ofrece puntos de carga habilitados para nuestros clientes”.
También Porsche hizo lo suyo con Taycan, un vehículo deportivo 100% eléctrico que se vende en el país.
“Hemos instalado cargadores en nuestras concesionarias y estamos en capacidad de asesorar y ayudar a instalar cargadores en las casas de nuestros clientes. También contamos con cinco Hybrid Vehicle Technicians en nuestros Porsche Center que pueden analizar y reparar autos híbridos y eléctricos”, afirma Hugo Pulenta, presidente de Porsche Argentina
Estos modelos vinieron a abrir paso a una competencia premium en el mercado, ya que obliga a sus rivales, tanto Mercedes Benz como BMW, a sumarse a la categoría.
En el caso de Mercedes Benz, durante el verano 2020 presentó el EQC, un SUV para el segmento mediano que convivirá en la Argentina con la GLC 350e Plug-In Hybrid.
La EQC tiene dos motores eléctricos alimentados por baterías de iones de litio de 80 kWh. Entregan una potencia de 408 CV y 760 Nm de torque, con tracción en las cuatro ruedas. Acelera de 0 a 100 km/h en 5,1 segundos, alcanza los 180 km/h y tiene una autonomía promedio de 450 kilómetros.
Ahora, se espera el próximo paso lo dé BMW, quien acaba de anunciar una inversión de u$s300 millones en la Argentina para extraer litio y destinarlo a la producción de baterías para autos eléctricos, que se serán más con más frecuencia en las calles del país.
Guillermina Fossati
Innovación