Page 26 - Inforeg 16
P. 26

enmarcadas en nuevos paradigmas globales, tal como el Objetivo de Desarrollo

        Sostenible (ODS) N° 5 de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas, referente a la
        Igualdad de Género.




        Para comprender la desigualdad histórica entre los géneros debemos pensar en las

        posiciones iniciales de desventaja. Para ilustrar esto, basta con recordar, por ejemplo,
        la sanción de la Ley N° 11.357 del año 1926 sobre la “Capacidad Civil de la Mujer”,

        a través de la cual se les reconoció a las mujeres  “…capacidad para ejercer todos

        los derechos y funciones civiles que las leyes reconocen al hombre mayor de edad”
        (artículo 1°).




                                                                                                 En otras palabras, las mujeres

                                                                                                 han tenido -desde el inicio
                                                                                                 de la organización social

                                                                                                 del mundo- que luchar para

                                                                                                 igualar derechos, es decir,
                                                                                                 no para lograr mayores

                                                                                                 privilegios sino tan sólo para

                                                                                                 tener el reconocimiento de
                                                                                                 aquellos derechos que a los

                                                                                                 hombres les venían dados

                                                                                                 por el solo hecho de serlo.
                                                                                                 Tal como se pudo observar a

                                                                                                 través del recorrido en este

                                                                                                 documento, lo mismo sucedió

                                                                                                 con la Ley de Voto Femenino.



                                                                                                 Aquella posición inicial de

                                                                                                 desventaja de la que han
                                                                                                 partido las mujeres tiene, hasta

                                                                                                 el día de hoy, consecuencias

                                                                                                 en sus vidas cotidianas. Aun

                                                                                                 cuando no esté en discusión la
                                                                                                 igualdad formal de derechos,

        resta mucho por transitar para el logro de la igualdad sustantiva y la igualdad real de

        oportunidades.


        Como vimos, las demandas del movimiento de mujeres iniciado a finales del siglo XIX

        se materializaron en 1947 con la conquista del voto femenino en Argentina. Luego,
        se hicieron realidad con la participación masiva en las urnas, el 11 de noviembre de

        1951. Llegar a ese día implicó un proceso agitado y difícil que continúa en el presente

        con nuevas reivindicaciones y reclamos. Aún queda un gran camino por recorrer hacia
        la paridad en la representación política. Sin embargo, Argentina ha avanzado en esa

        búsqueda de igualdad, de hecho nuestro país fue el primero del mundo en sancionar


   24
   21   22   23   24   25   26   27   28   29   30   31