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a) Si los datos individualizantes del automotor peritado permiten concluir que se está en
presencia del rodado originalmente inscripto.
b) Si la pieza identificada con R.P.A o R.P.M. presenta el grabado de ese código.
c) Si las características de marca y modelo de la pieza identificada con el código R.P.A o
RPM que se perita coinciden con aquellas informadas por el Registro Seccional.
Simplemente, hay casos en los cuales el vehículo por algún motivo sufrió cierto tipo de
daño en el sector del motor, chasis o cuadro donde se encuentra grabado el número que lo
identifica.
Al verificar que no hay actitud delictiva (esto implica no estar ante la presencia de un
motor, chasis o cuadro, por ejemplo, robado) se procede a otorgar en el Registro una orden
para que se grave un nuevo número que tendrá como primeros dígitos identificatorios la
sigla R.P.A. o R. P. M.
Este gravado no necesariamente lo hace un perito de planta verificadora, si así fuera, se
salvaguardaría aún más la seguridad.
Por ejemplo, muchos sabemos que una forma que tienen los delincuentes es buscar
en desarmaderos o chacharitas (como les decimos en el pueblo) vehículos chocados o
destruidos pero que tienen la documentación en forma correcta.
Por ejemplo, un coche modelo 2019 que sufrió un accidente de tránsito que lo destruyó
y es vendido como chatarra, pero cuyo dueño tiene los papeles totalmente en regla, lo
compran transfieren y como, supuestamente lo van a arreglar, solicitan el R.P.M. o R.P.A.
Lamentablemente aquí
interviene un tercero que otorga
una factura que abala una
reparación que no se realizó.
Creo que si se verificara si todo
lo facturado ingresó en el taller,
varios tendrían problemas.
Lamentablemente por esos
“chapistas deshonestos”
quedan mal los que trabajan
bien y decentemente que,
afortunadamente, son la
mayoría.
Volviendo a mi ejemplo, cuando tienen todo, fotos, factura, ddjj, etc., es decir, lo que pide
el encargado para otorgar el R.P.A. la graban pero no en el chasis o motor roto porque la
reparación es cara.
Lo que hacen es poner un chasis o motor robado de otro vehículo y grabarlo en ese. Como
es de libre grabado para esto, los delincuentes contactan a los que llaman “artesanos”.
Otra cosa que suele pasar es que se grabe dicha codificación en dos o más unidades
provocando lo que conocemos como autos gemelos o mellizos, los cuales son vendidos en
diferentes puntos del país y con documentación es decir título y cédula también falsa.
Me ha tocado ver en el Registro gente venir con emoción, feliz de haber gastado sus
ahorros en comprar su vehículo y ver como su rostro se desencaja cuando le digo que lo
que tienen es documentación adulterada.
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